Un Encanto Natural en el Corazón de la Sierra
Situado en la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, el pueblo de Alájar se encuentra rodeado de bosques de alcornoques, encinas y castaños. Es un destino perfecto para quienes buscan desconectar durante un domingo, combinando historia y naturaleza en un entorno único. Desde su casco antiguo, caracterizado por casas blancas y calles empedradas, hasta la majestuosa Peña de Arias Montano, el paisaje ofrece vistas impresionantes que cautivan a todos los visitantes.
La ruta principal comienza en la plaza central del pueblo y asciende por sus callejuelas hasta llegar a la Peña. El sendero serpentea entre bosques y pequeños arroyos, alcanzando un mirador natural que domina los valles y pueblos cercanos. Con aproximadamente 6 kilómetros en ida y vuelta y un desnivel moderado, esta caminata es accesible para familias y caminantes con experiencia media.
Desde lo alto de la Peña, las vistas abarcan todo el valle y las localidades cercanas. La estación otoñal transforma el paisaje en una paleta cálida de colores, mientras que la niebla matutina añade un toque misterioso. Además del sendero principal, Alájar cuenta con un casco histórico declarado Conjunto Histórico-Artístico, donde fuentes tradicionales y rincones pintorescos invitan a pasear, disfrutar de un café o simplemente absorber el ambiente serrano.
Para quienes desean ampliar su recorrido, pueden visitar la ermita de Nuestra Señora de los Ángeles o explorar el famoso Arco de los Novios. Según la tradición local, las parejas que cruzan bajo este arco tomados de la mano tienen muchas probabilidades de casarse en el futuro. La combinación perfecta entre naturaleza, historia y leyendas hace que esta escapada sea ideal para relajarse un domingo y conectar con el entorno rural.



